Y
es que, no es fácil saber por qué llora un recién nacido, sobre todo para las
madres y los padres primerizos, y aunque los principales motivos son hambre,
dolor, enfado o miedo, los adultos no reconocen fácilmente qué emoción es la
que provoca sus lágrimas.
"El
llanto es la principal forma que tienen los bebés de comunicar las emociones
negativas y, en la mayor parte de los casos, la única manera que tienen de
expresarlas".
Según
los resultados, las principales diferencias se presentan en la actividad ocular
y en la dinámica del llanto. En este último, los expertos han comprobado que
tanto los gestos como la intensidad del lloro se van incrementando gradualmente
si se debe a un enfado, mientras que aparecen en su máxima intensidad desde el
primer momento en el caso del dolor y del miedo.
Por
otra parte, los expertos han observado también cuál es el grado de precisión
que tienen los adultos para reconocer la emoción que provoca el llanto. De esta
forma, han comprobado que los padres no suelen identificar claramente qué
emoción es la que induce el llanto, especialmente cuando se trata de enfado y
miedo.
Para
los expertos, el hecho de que el dolor sea la emoción más fácil de reconocer
puede tener una explicación adaptativa, ya que el llanto es una advertencia de
una amenaza potencialmente grave para la salud o la supervivencia y requiere
una respuesta más urgente por los cuidadores.
ENFADO,
MIEDO, DOLOR
En
concreto, cuando un bebé llora, la actividad muscular de su rostro se
caracteriza por una gran tensión en la frente, las cejas o los labios, la
apertura de la boca y la elevación de las mejillas.
En
este sentido, cuando están enfadados la mayoría de los bebés mantienen los ojos
medio cerrados, con una mirada aparentemente sin dirección o, por el contrario,
fija y prominente. Su boca está abierta o entreabierta, y la intensidad del
llanto aumenta progresivamente.
En
el caso del miedo, los ojos permanecen abiertos casi todo el tiempo. Es más, a
veces tienen una mirada escrutadora, mueven la cabeza hacia atrás, y el llanto
aparece de forma explosiva, después de un aumento gradual de la tensión.
Por
último, el dolor se manifiesta con los ojos cerrados casi todo el tiempo, y en
los pocos momentos en los que están abiertos, la abertura es mínima y distante
de la mirada. Además, existe un alto grado de tensión en la zona ocular y el
ceño fruncido. El llanto, que desde el principio alcanza su intensidad máxima,
comienza de forma repentina e inmediatamente después del estímulo.
Fuente:
www.europapress.es